Endibias para unos, endivias para otros; pero, si somos sinceros, a nosotros lo que nos entra es un poco de «envidia» (sanísima, eso sí) cuando vemos las fotos de vuestras recetas y no podemos lanzarnos ipso facto a la cocina a prepararlas y degustarlas. Es lo que nos ha pasado hoy con la receta de Silvia, con quien nos encanta jugar a las cocinitas.
Esta vez Silvia nos cuenta que hasta ahora le costaba dar con una receta en la que encajasen las endibias, pero que esta vez cree haber dado con la fórmula ideal para que no le vuelva a pasar. Nosotros estamos convencidos de que están riquísimas, pero no podemos esperar más a comprobarlo.
Ingredientes:
- Endibias baby
- Una cebolla pequeña
- 75 gramos de queso picón (queso azul que se elabora en Cantabria)
- Un brick de nata pequeño (200 ml)
- Anchoas Serrats
- Aceite de oliva
- Una pizca de sal
- Una pizca de pimienta negra
Elaboración:
- Limpiamos las endibias, las lavamos y las cortamos por la mitad longitudinalmente. Las secamos y reservamos.
- Picamos la cebolla en brunoise (pequeños dados) y la pochamos a fuego lento en una sartén con un poco de aceite de oliva. Salpimentamos.
- Cuando la cebolla esté doradita, añadimos el queso desmigado y mezclamos con una cuchara de madera, para ayudar a que se funda.
- Añadimos la nata y dejamos que se cocine 3 o 4 minutos a fuego muy suave.
- Retiramos, dejamos que temple y trituramos hasta conseguir una salsa fina (Silvia nos cuenta que si vemos que queda demasiado espesa, la podemos aligerar con un poco más de nata).
- Disponemos las endivias en el plato y echamos la salsa sobre ellas.
- Colocamos las anchoas (enteras o en trocitos, según gustos) y ¡listo para servir!
¡Qué ricas, Silvia!