Ventresca de Bonito del Norte en aceite de oliva. Lata 115g.

​​El "Bonito del Norte" o "Thunnus Alalunga" se captura, uno a uno, en el mar Cantábrico, en aguas del Golfo de Vizcaya durante la costera de verano y mediante artes de pesca tradicionales. Su sabor intenso a mar, su carne clara y sus propiedades le han convertido, sin lugar a dudas, en el rey de los túnidos.

Una vez seleccionados los mejores ejemplares y pasado el proceso de cocción, el pescado se prepara y envasa utilizando técnicas artesanales. La destreza y experiencia adquirida a lo largo de cinco generaciones es parte de nuestro secreto para conseguir el aspecto y sabor excepcionales, de carne blanca sabrosa y apetitosa, que caracterizan a nuestras conservas.

Compra la lata de Ventresca, que contiene la parte de textura más suave y delicada del Bonito del Norte. La Ventresca es la zona situada en la parte inferior del pescado, la que está cerca de la cabeza, y es sin duda la parte más jugosa y sabrosa. Un auténtico lujo dentro de las conservas. Visualmente también se diferencia ya que su aspecto es laminado a diferencia de los lomos. Una vez hemos cocido el Bonito del Norte y separado la Ventresca, la limpiamos a mano con un cuchillito hasta que está perfectamente limpia y la metemos en la lata con mucho cuidado, ya que su carne es tan delicada que podría romperse. A continuación le añadimos un aceite de oliva de alta calidad y de sabor suave para que le aporte un ligero aroma y refuerce esa textura melosa tan característica, pero que mantenga y no enmascare el sabor delicado y genuino de la Ventresca de Bonito del Norte.

Como curiosidad… ¿Sabías que de un Bonito del Norte de 9 kilos sólo sacamos una lata y media de Ventresca de 81g? ¿A qué es increíble?

Es importante destacar también que nuestra Ventresca de Bonito del Norte además de deliciosa, es una joya a nivel nutricional, ya que aporta a tu organismo proteínas de alto valor biológico, grasas saludables (omega 3), vitaminas y minerales.

Elige nuestras conservas de Ventresca de Bonito del Norte, ¡disfrute máximo y magníficas para tu salud! Además siempre están listas para consumir, duran mucho tiempo y no necesitan frío.

Un último consejo práctico, una vez abierta la lata de Ventresca, y en el muy hipotético caso de que no la termines, te recomendamos guardarla en el frigorífico cubierta de aceite de oliva y consumirla en un plazo de 3-4 días.